LA INVESTIGACIÓN CUALITATIVA
(I)
Por: Jesús Guerra Garrido
Introducción
En los procesos relacionados con la investigación en el marco de las ciencias sociales y humanas la investigación de corte cuantitativo ha ocupado mayores centimetrajes y espacios en la historia pasada y presente, quedando en un plano secundario una alternativa que ha generado importantes aportes al quehacer científico como son los estudios de metodología cualitativa o investigación cualitativa.En los últimos años se han producido cambios significativos que le han permitido a los métodos cualitativos ocupar un espacio mayor en los reportes relacionados con las investigaciones en los ámbitos de la sociología, psicología, historia, geografía, las ciencias médico-asistenciales y educativas, entre otras.
Esta presencia creciente de la investigación cualitativa en las ciencias sociales y humanas y la poca importancia que se le ha dado a la misma en el desarrollo y evolución de las disciplinas que forman parte de este conglomerado, obliga a conocer su significado e implicaciones en el quehacer científico, destacando todo lo que tiene que ver con su basamento, importancia y aplicación en los diferentes estudios relacionados con la sociedad y el hombre.
El desarrollo de este ensayo apunta hacia los aspectos antes referidos y en tal sentido el mismo se efectúa a través del abordaje de: los aspectos históricos relacionados con la investigación cualitativa, los elementos epistemológicos y metodológicos que la fundamentan; la importancia que ha venido teniendo la investigación cualitativa no solo para la producción de conocimientos en el ámbito de las ciencias sociales y humanas, sino también en los procesos de transformación social en el mundo y su aplicación actual en las investigaciones propias de estas disciplinas.
Breve referencia histórica de la investigación cualitativa
Bogdan y Taylor (1987), tomando como referencia a Wax, señalan que métodos y técnicas de corte cualitativo como la observación descriptiva y la entrevista son tan antiguos como la historia escrita. Destacan, basándose en el autor mencionado, que los orígenes del trabajo de campo pueden rastrearse hasta historiadores, viajeros y escritores que van desde Heródoto hasta Marco Polo, aun cuando su utilización en la investigación social logra hacerse consciente a partir del siglo XIX y siglo XX y en ese sentido, resaltan el estudio realizado por Frederick LePlay en 1855 sobre familias y comunidades, que llegó a ser considerada la primera investigación sociológica científica, ya que combina la observación empírica con la extracción de inferencias esenciales dentro de criterios científicos.
Es en el marco de la antropología donde primeramente la investigación cualitativa y sus métodos logran tener un impacto y una presencia significativa, realidad que Bogdan y Taylor la atribuyen al hecho de que la aplicación de instrumentos como el cuestionario y el manejo de herramientas estadísticas, entre otros tiene una mayor aplicabilidad en el estudio de grandes conglomerados sociales urbanos, que en las culturas tribales, sumado a que los antropólogos no estaban familiarizados con esas culturas, como si lo estaban los sociólogos con la vida propia de la sociedad en la que vivían.
Sin embargo, resaltan el hecho de que en la sociología norteamericana la metodología cualitativa llega a tener una presencia importante, concretamente en las investigaciones sobre la vida urbana, vida de criminales y delincuentes juveniles y la de los inmigrantes y sus familias en Polonia y los Estados Unidos. Dichos estudios fueron realizados en la Universidad de Chicago específicamente por la llamada "Escuela de Chicago" durante la década de 1940, utilizando la observación participante, documentos personales y la entrevista en profundidad como técnicas fundamentales de apoyo. Un aspecto de importancia a resaltar es que en el marco de esta escuela se propugna un enfoque interaccionista, donde se destaca la naturaleza social e interactiva de la realidad como producto de un proceso de construcción y reconstrucción que se lleva a cabo de generación en generación a través de una continua interacción social (Tójar Hurtado, 2006)
A pesar de la importancia de estos estudios, a finales de los 40 e inicios de la década de 1950 la investigación cualitativa declinó en Estados Unidos como consecuencia de las grandes teorías como la de Parson y la presencia creciente y determinante de los métodos cuantitativos. Pero a partir de la década de 1960 se produce un resurgimiento de los métodos cualitativos representado en los estudios de envergadura como los de Goffman en 1961 y Becker en 1963. Así mismo, los trabajos monográficos de Lofland en 1971 y 1976, Schatzman y Strauss en 1973 y Van Maanen y otros en 1982; las compilaciones de Filstead en 1960, McCall y Simmons en 1969, Glazer en 1972, entre otros y libros donde se precisan y examinan los fundamentos filosóficos de la investigación cualitativa como el de Bruyn en 1966 y se relacionan los métodos cualitativos con el desarrollo de la teoría, como el de Glaser y Strauss, dan cuenta de una prolífica producción en el campo de la investigación cualitativa que ha seguido incrementándose en los últimos años.
En América Latina es importante destacar que el desarrollo de la investigación cualitativa surge como parte fundamental de propuestas metodológicas alternativas a la metodología cuantitativa impuesta desde los países del centro a los de la periferia, emergiendo la alternativa cualitativa dentro de saberes y prácticas desarrolladas y difundidas desde principios de la década de 1980 en las cuales se destacan los aportes de Orlando Fals Borda, a través de la investigación-acción aplicada en la sociología de la educación y Pablo Gonzáles Casanova, quien revaloriza la investigación cualitativa como una alternativa en las nuevas ciencias y humanidades.
Las propuestas de la historia oral de Silvia Rivera Cusicanqui, en 1987, la investigación de Spees en 2006 y la difusión de la investigación colaborativa que impulsa Xochitl Leyva en 2008 consolidaron y reafirmaron los logros de estos autores, buscando rescatar el protagonismo de las culturas latinoamericanas que encarnan otros saberes a través de un trabajo conjunto entre investigadores y comunidades con la finalidad de rescatar la diversidad de expresiones culturales, teniendo como medio el diálogo intercultural de tal forma que se logra potenciar la capacidad colectiva de la investigación en esta parte del mundo (Mejía Navarrete, 2015).
Esta breve relación histórica viene ser una muestra inequívoca de la importancia de la investigación cualitativa en los procesos de construcción del conocimiento y su presencia inadvertida en el desarrollo de las ciencias sociales y humanas, quizás debido a la preponderancia que se le ha dado al paradigma positivista y a la investigación cuantitativa. Igualmente, muestra las perspectivas que en el contexto de la realidad actual tiene el enfoque cualitativo como una forma de abordar la realidad desde la perspectiva de una racionalidad intersubjetiva.
Bogdan y Taylor (1987). Introducción a los métodos cualitativos de investigación. La búsqueda de significados. Buenos Aires: Paidos Básica.
Mejía Navarrete, La investigación social en América Latina: Posibilidades metodológicas. Memoria Académica, vol. 5, nº 1. Recuperado de: http://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.6664/pr.6664.pdf.
Tójar Hurtado, J.C. (2006). Investigación cualitativa: comprender y actuar. Madrid: La Muralla.
Es en el marco de la antropología donde primeramente la investigación cualitativa y sus métodos logran tener un impacto y una presencia significativa, realidad que Bogdan y Taylor la atribuyen al hecho de que la aplicación de instrumentos como el cuestionario y el manejo de herramientas estadísticas, entre otros tiene una mayor aplicabilidad en el estudio de grandes conglomerados sociales urbanos, que en las culturas tribales, sumado a que los antropólogos no estaban familiarizados con esas culturas, como si lo estaban los sociólogos con la vida propia de la sociedad en la que vivían.
Sin embargo, resaltan el hecho de que en la sociología norteamericana la metodología cualitativa llega a tener una presencia importante, concretamente en las investigaciones sobre la vida urbana, vida de criminales y delincuentes juveniles y la de los inmigrantes y sus familias en Polonia y los Estados Unidos. Dichos estudios fueron realizados en la Universidad de Chicago específicamente por la llamada "Escuela de Chicago" durante la década de 1940, utilizando la observación participante, documentos personales y la entrevista en profundidad como técnicas fundamentales de apoyo. Un aspecto de importancia a resaltar es que en el marco de esta escuela se propugna un enfoque interaccionista, donde se destaca la naturaleza social e interactiva de la realidad como producto de un proceso de construcción y reconstrucción que se lleva a cabo de generación en generación a través de una continua interacción social (Tójar Hurtado, 2006)
A pesar de la importancia de estos estudios, a finales de los 40 e inicios de la década de 1950 la investigación cualitativa declinó en Estados Unidos como consecuencia de las grandes teorías como la de Parson y la presencia creciente y determinante de los métodos cuantitativos. Pero a partir de la década de 1960 se produce un resurgimiento de los métodos cualitativos representado en los estudios de envergadura como los de Goffman en 1961 y Becker en 1963. Así mismo, los trabajos monográficos de Lofland en 1971 y 1976, Schatzman y Strauss en 1973 y Van Maanen y otros en 1982; las compilaciones de Filstead en 1960, McCall y Simmons en 1969, Glazer en 1972, entre otros y libros donde se precisan y examinan los fundamentos filosóficos de la investigación cualitativa como el de Bruyn en 1966 y se relacionan los métodos cualitativos con el desarrollo de la teoría, como el de Glaser y Strauss, dan cuenta de una prolífica producción en el campo de la investigación cualitativa que ha seguido incrementándose en los últimos años.
En América Latina es importante destacar que el desarrollo de la investigación cualitativa surge como parte fundamental de propuestas metodológicas alternativas a la metodología cuantitativa impuesta desde los países del centro a los de la periferia, emergiendo la alternativa cualitativa dentro de saberes y prácticas desarrolladas y difundidas desde principios de la década de 1980 en las cuales se destacan los aportes de Orlando Fals Borda, a través de la investigación-acción aplicada en la sociología de la educación y Pablo Gonzáles Casanova, quien revaloriza la investigación cualitativa como una alternativa en las nuevas ciencias y humanidades.
Las propuestas de la historia oral de Silvia Rivera Cusicanqui, en 1987, la investigación de Spees en 2006 y la difusión de la investigación colaborativa que impulsa Xochitl Leyva en 2008 consolidaron y reafirmaron los logros de estos autores, buscando rescatar el protagonismo de las culturas latinoamericanas que encarnan otros saberes a través de un trabajo conjunto entre investigadores y comunidades con la finalidad de rescatar la diversidad de expresiones culturales, teniendo como medio el diálogo intercultural de tal forma que se logra potenciar la capacidad colectiva de la investigación en esta parte del mundo (Mejía Navarrete, 2015).
Esta breve relación histórica viene ser una muestra inequívoca de la importancia de la investigación cualitativa en los procesos de construcción del conocimiento y su presencia inadvertida en el desarrollo de las ciencias sociales y humanas, quizás debido a la preponderancia que se le ha dado al paradigma positivista y a la investigación cuantitativa. Igualmente, muestra las perspectivas que en el contexto de la realidad actual tiene el enfoque cualitativo como una forma de abordar la realidad desde la perspectiva de una racionalidad intersubjetiva.
REFERENCIAS
Bogdan y Taylor (1987). Introducción a los métodos cualitativos de investigación. La búsqueda de significados. Buenos Aires: Paidos Básica.
Mejía Navarrete, La investigación social en América Latina: Posibilidades metodológicas. Memoria Académica, vol. 5, nº 1. Recuperado de: http://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.6664/pr.6664.pdf.
Tójar Hurtado, J.C. (2006). Investigación cualitativa: comprender y actuar. Madrid: La Muralla.